Elimina el estrés innecesario de tu vida

Elimina el estrés

“La mejor arma contra el estrés es nuestra capacidad de elegir un pensamiento sobre otro.”
William James

El estrés puede provenir de una variedad de situaciones en nuestras vidas. Plazos para terminar un trabajo. El tráfico. Las deudas. Discusiones con una pareja o con un amigo. Cuando estamos estresados nos sentimos menos felices y puede hacer que nos desquitemos del mismo comiendo alimentos pocos saludables, fumando o bebiendo.

Si bien no es posible vivir una vida 100% libre de estrés, tú puedes contribuir a reducir un poco el estrés del día a día, lo que te conducirá a una vida más feliz y más saludable. No tienes necesariamente que hacer un cambio radical en tu vida. Tan sólo unos pequeños cambios pueden producir un gran impacto.

Cómo eliminar el estrés innecesario de tu vida

1. Tomate un tiempo para divertirte

No importa lo ocupado que estés, siempre hay tiempo para divertirse. No importa que te tomes unos pocos minutos para ver un divertido vídeo de YouTube o te tomes algo de tiempo para jugar con tu perro, es esencial disfrutar de los pequeños momentos de la vida.

Cuando liberas tu mente de aquello que te está estresando y te centras totalmente en algo que te divierta, podrás conseguir ser más exitoso a largo plazo. Al final de tu vida, seguro que no desearías haber pasado más tiempo en el trabajo. Pero es posible que desearas haber pasado más tiempo divirtiéndote.

2. Realiza una cosa a la vez

Muchos de nosotros pensamos que la multitarea es un hábito deseable. Sin embargo, tratar de hacer dos o tres cosas a la vez puede hacer que nos pongamos frenéticos y que nos agotemos física y mentalmente, en última instancia nos va a llevar más tiempo completar nuestras listas de tareas que si hubiéramos hecho una sola cosa a la vez.

No hay nada malo en trabajar a un ritmo lento y constante, centrándote en un proyecto o aspecto de tu vida a la vez antes de pasar a la siguiente. Así es como se supone que funcionamos mejor los seres humanos. Si estás conduciendo, sólo conduce el coche. Si estás al teléfono, simplemente hable. No sientas la necesidad de hacer ambas cosas a la vez.

3. Deja de tratar de controlar lo incontrolable

¿No sería maravilloso si pudiéramos hacer que todo siga su camino, todo el tiempo? ¡Por supuesto que sí! Sin embargo ninguna persona controla totalmente todos los aspectos de su vida y menos podemos controlar la forma de actuar de otras personas. No importa si son las personas, las situaciones o hasta el tiempo que hace, cuando nos preocupamos por cosas que escapan a nuestro control nos volvemos más ansiosos de lo que tenemos que ser.

Lo único que puedes controlar es a ti mismo y tus reacciones a lo incontrolable. En lugar de tratar de controlar la forma en que otras personas actúan, controla cómo reaccionas ante ellas. Tú serás mucho más feliz a largo plazo.

4. Ten expectativas realistas

Siempre debemos establecer altos estándares y tener altas expectativas para nosotros mismos pero no tan altas que resulten poco realistas.

Así que, mientras tú esperas lo mejor de ti mismo, no deberías crear expectativas poco realistas sobre aquello en lo que te quieres convertir o sobre lo que quieres hacer. Si creas expectativas poco realistas, te vas a comprometer con el fracaso y la decepción. Siempre ve por objetivos realistas y alcanzables. Esto es saludable para tu bienestar físico y emocional.

“Cada estrés deja una cicatriz indeleble, y el organismo paga por su supervivencia después de una situación estresante, al convertirte en una persona un poco más vieja.”
Hans Selye


Sobre el Autor

Desde joven siempre tuve inquietud por los temas relacionados con el desarrollo personal pero no fue hasta hace algunos años cuando decidí convertirme en un estudiante activo de la psicología positiva, la motivación y la búsqueda del éxito y la felicidad. Autor del libro Camino a la superación.

Deja un comentario