5 razones para usar el transporte público que aumentará tu productividad

Esta mañana al estar viendo el noticiero mientras desayunaba, estaban hablando de la gran contaminación que existe en la ciudad por la falta de lluvias que ha habido en los últimos meses, la contaminación se debe fundamentalmente a la gran cantidad de automóviles que entran en la ciudad a diario, pero esto tiene una fácil solución y además dicha solución tiene muchas ventajas que aumentaran tú productividad.

Pregunta a cualquier número de personas que es lo que valoran más en la vida y probablemente te dirán, el tiempo, el dinero y la paz mental, estás seguramente estarán en sus más altas prioridades.

Razones para usar el transporte público

Sin embargo, muchos de nosotros parecemos estar dispuestos a renunciar a una gran cantidad de estas cosas supuestamente por la facilidad y la comodidad que deriva de tener nuestros amados coches, incluso aunque ellos nos estén comiendo nuestras finanzas, nos mantengan estresados a causa del tráfico y nos quiten nuestro preciado tiempo.

¡No temas!, hay una alternativa y su nombre es Transporte Público.

5 razones para usar el transporte público que aumentará tu productividad

Suena simple, pero dejando el automóvil y usando el transporte público podrías ahorrar más de lo que piensas.

1. Ahorre su dinero

Además del dinero que inicialmente vas a gastar en el propio vehículo, si sumamos los impuestos, seguros, reparaciones, además del dinero que gastamos en combustible tienes que tener en cuenta que el vehículo nos cuesta un ojo de la cara.

Sume todos los gastos y calcule realmente cuánto le cuesta su coche a lo largo de un año. Luego compáralo con la cantidad que le costaría viajar en transporte público. En este último caso resultaría más barato, ¿Qué estás esperando?

El dinero que te ahorraras podrá ser invertido en tus metas a largo plazo o simplemente puedes guardarlo para alguna emergencia.

2. Ahorre su tiempo

A menos que seas David Hasslehoff en el Coche Fantástico (o Auto Fantástico en Latinoamérica), una vez que estés conduciendo tus manos y mente estarán totalmente ocupados.

En el transporte público sin embargo, el tiempo es tuyo. Tú podrías pasar tu viaje leyendo ese libro de gestión empresarial que has adquirido recientemente (es habitualmente lo que yo hago), podrías estar anotando las ideas para tu próximo gran proyecto, podrías estas poniendo al día tú lista de tareas o incluso estar leyendo tu e-mail antes de llegar a la oficina.

Sea lo que sea que decidas hacer, es sin duda mejor que ser un esclavo de tu automóvil durante todo el viaje.

3. Salve su cordura

Alguna vez te has inclinado sobre el volante en un día caluroso, con tu corazón palpitando fuertemente, la respiración y la mente aceleradas de sucumbir a la ira y a la locura por el tráfico que te rodea por todos lados o por haberte quedado atrapado en un atasco.

Trata de tomar el autobús a cambio.

El tráfico beligerante todavía no se moverá, pero ahora tendrás tu música favorita sonando en tu iPod, estarás absorto con el nuevo libro que te has estado muriendo por leer, estarás ocupado apuntando algunas ideas para ese gran proyecto tuyo o podrías estas realizando cualquier número de otras cosas que apenas se nota en el caos más allá del autobús.

Todo estará bien, estarás tranquilo y llegaras a tu destino totalmente libre de estrés y estarás listo para un día productivo.

¿Cuál suena mejor?

4. Sálvate a ti mismo

Cuando conduces al trabajo la cantidad de ejercicio que haces es mínima, caminaras unos pocos pasos desde tu vivienda hasta la puerta del coche y luego un poco más desde el coche a tu lugar de trabajo.

Cuando tomas el transporte público por otro lado, prácticamente te obligas a añadir un poco más de ejercicio en tu vida al caminar (o bueno, ¿Por qué no correr un poco?) para coger el autobús o el tren y a continuación caminar de nuevo hasta el trabajo. Si estás luchando por incluir el ejercicio en tu estilo de vida, esta es una manera fácil y rápida de aumentar la actividad en tu rutina diaria.

5. Salva el mundo

El punto final es probablemente el más obvio pero vale la pena mencionar.

No hace falta ser un eco-genio para darse cuenta que entre más automóviles haya en la carretera más emisiones habrá hacia la atmósfera, aumentando la contaminación y trayendo al mundo un paso más hacia una muerte prematura.

Al dejar el tuyo en el garaje y usar el transporte público, estarás haciendo tu parte en acabar con la contaminación y en última instancia salvar al mundo.


Sobre el Autor

Desde joven siempre tuve inquietud por los temas relacionados con el desarrollo personal pero no fue hasta hace algunos años cuando decidí convertirme en un estudiante activo de la psicología positiva, la motivación y la búsqueda del éxito y la felicidad. Autor del libro Camino a la superación.

2 comentarios

  1. Buenos días Oliver; ojalá tomáramos consciencia de lo que escribes y lo que dices, aportando un grano de arena cada uno de nosotros, podríamos crear millones de playas. Hay personas que no tienen más remedio que coger su coche para ir a sus puestos de trabajo, pero me consta que otros muchos lo cogen por la “facilidad” de aparcar en la puerta. Pero que bueno sería coger el transporte público, o ir andando o una bicicleta, el carril bici en las ciudades está tomando su auge…. pero como tú y yo sabemos, nos queda mucho, podemos empezar por uno mismo, ¿no?

    Un saludo.

    • Oliver Araujo en

      Efectivamente Yván, lo importante es empezar y que cada uno de nosotros aportemos nuestro grano de arena como has comentando.

      Gracias por el comentario.

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