Cómo cambiar tu estado de ánimo: 5 sencillos consejos

Todas las personas tenemos días malos en los que nuestro estado de ánimo decae y nos volvemos muy negativos. Días en lo que no tienes ganas de hacer nada y en los cuales te dejas llevar por tus emociones.

Pero tu estado de ánimo es esencial a la hora de lograr tus metas. Si continuamente estás de mal humor, desmotivado y/o triste, difícilmente vas a obtener lo que deseas porque todo empieza dentro de ti.

Cambiar tu estado de ánimo

“Escribe en tu corazón que cada día es el mejor día del año.”
Ralph Waldo Emerson

Puede que hoy sea un día de esos. Si es así, recuerda que el día de hoy aún no ha terminado y que todavía puedes sacar algo bueno de ello. Puedes lograrlo cambiando tu estado mental y emocional.

5 Consejos que te ayudaran a mejorar tu estado de ánimo

Aquí tienes cinco de mis métodos favoritos que te animaran en cuestión de minutos:

1. Valora más todo lo que tienes.

Una forma muy efectiva de convertirte en una persona más positiva y poder disfrutar de la vida es simplemente desarrollando el hábito de apreciar más todo lo que tienes.

Si deseas algunas sugerencias, aquí tienes varias de las cosas que yo agradezco y valoro:

  • Mi comida.
  • Mi salud.
  • Mis amigos y mi familia.
  • Tener este blog y la oportunidad que tengo de escribir sobre lo que quiero.
  • Todas las personas que me leen.

Lo gracioso de todo es que si comienzas a apreciar algo en particular, tu atención comienza a saltar rápidamente a otras cosas y empiezas a valorar todo lo que te rodea. Puedes comenzar con la comida que está comiendo en este momento. Luego mueves tu atención al teléfono y aprecia que puedes ponerte en contacto con cualquier persona -y que cualquiera se puede poner en contacto contigo- cuando lo desees. Luego puedes mover tu atención hacia el exterior a través de la ventana y disfrutar del maravilloso sol.

Intenta hacer esto por dos o tres minutos. Intenta encontrar todas las cosas en ti y en tu mundo que puedas apreciar y por las cuales estas agradecido.

“La gratitud pinta pequeños rostros sonrientes en todo lo que toca.”
Richelle E. Goodrich

2. Usa tu cuerpo para cambiar cómo te sientes

Si cambias la forma como te mueves y usas tu cuerpo, tu estado de ánimo cambiará. Por ejemplo, si quieres sentirte más feliz entonces fuerza una sonrisa durante unos 60 segundos y te sentirás más feliz. Si deseas sentirse más seguro, levántate y camina por unos minutos de forma erguida y con aplomo y te sentirás más confiado.

Una de las claves para un mejor uso de esta técnica es concentrarte en tu cuerpo y cambiar la forma como te mueves pero luego desviar tu enfoque hacia el mundo que te rodea. Hacerlo me ha dado resultados más confiables y consistentes que cuando me enfocaba en mí.

Si te enfocas en el exterior, no te vuelves tan consciente de ti mismo. Si, por otro lado, mantienes tu enfoque en ti y en lo que estás haciendo mientras haces algo, te vuelves más tímido. Y ese autoanálisis y esa autoconciencia contrarrestan gran parte del efecto emocional positivo que puedes crear al cambiar la forma en que usas tu cuerpo.

3. Actúa de la forma como quisieras estar.

Si deseas sentirte más positivo, entonces pregúntate: ¿Qué haría una persona realmente positiva en esta situación? Realiza justamente eso y entonces te sentirás más positivo.

Haz una llamada o contesta el teléfono de una manera positiva. Escribe un correo electrónico de manera positiva y entusiasta. En lugar de pensar que una situación probablemente será aburrida y no tan beneficiosa, piensa en ella como algo que será emocionante, divertido y útil.

Se trata de hacer las cosas de forma diferente al igual que cuando usas tu cuerpo para cambiar tu estado anímico. En lugar de ser una persona que ya tiene una actitud positiva o posee un buen estado de ánimo positivo y que por lo tanto ya actúa de manera positiva cuando algo le sucede, tu actúas al revés. Comienzas actuando o fingiendo como lo haría esa persona en esa situación si tuvieras un estado de ánimo positivo, luego poco a poco realmente crearás un verdadero estado de ánimo positivo dentro de ti.

“Actúa como si ya fueras un hombre rico y seguramente serás rico. Actúa como si tuvieras una gran confianza y la gente tendrá confianza en ti. Actúa como si tuvieras una gran experiencia y entonces la gente va a seguir tu consejo. Y actúa como si tuvieras un gran éxito y tan seguro como que estoy aquí, te convertirás en una persona exitosa.”
Jordan Belfort

4. Hazte las preguntas correctas.

Si estás haciendo preguntas desmotivadoras como: “¿Por qué me pasó esto a mí?” o “¿Cuáles son todas las cosas horribles por las que tengo que pasar?”, por supuesto que te vas a sentirte mal y no harás nada para progresar en tu vida.

Por otro lado, si comienzas a hacerte preguntas útiles sobre la situación en la que te encuentras o acerca del día por el que estas pasando, entonces puedes cambiar rápidamente cómo te siente y ponerte en acción. Te empoderas en vez de quedarte atrapado teniendo pensamiento de víctima.

Algunas buenas preguntas son:

  • ¿Realmente es un problema lo que estoy pasando?
  • ¿Esto situación importará dentro de 5 años?
  • ¿Qué oportunidad oculta me trae este problema?

5. Recuerda tus experiencias y recuerdos positivos.

Es fácil ser superado por la charla negativa interna.

Al prepararte para una reunión, una entrevista de trabajo, una presentación o cualquier cosa que te ponga realmente nervioso, recuerda aquellos recuerdos positivos que hayas tenido de experiencias similares. Piensa en aquellos momentos cuando actuabas de forma graciosa y eras encantador. Recuerda los momentos en que estuviste confiado y relajado durante reuniones y entrevistas anteriores. Deja que algunos de tus mejores recuerdos te inunden. Deje que te consuelen y te ayuden a darte cuenta de que ya has pasado por eso y que las cosas fueron bien durante esas situaciones.

Hacerlo te ayudara a recordarte los aspectos positivos y maravillosos que hay dentro de ti mismo. Las cualidades y tus posibilidades internas que siempre estarán ahí.

También puedes usar este consejo para recordar cómo te veías cuando te sentías confiado en el pasado. Cómo actuabas físicamente y que decías. Luego, utiliza esos recuerdos y esas emociones para deslizarte más fácilmente hacia un estado mental de confianza lo mencionado en el segundo consejo.


Sobre el Autor

Desde joven siempre tuve inquietud por los temas relacionados con el desarrollo personal pero no fue hasta hace algunos años cuando decidí convertirme en un estudiante activo de la psicología positiva, la motivación y la búsqueda del éxito y la felicidad. Autor del libro Camino a la superación.

Deja un comentario